En el Día Internacional contra el Cáncer de Mama son varios los temas a tratar sobre una enfermedad que afecta cada año a más de 63.000 personas. Aunque es necesario remarcar esta cifra, es más necesario aún que las personas no afectadas conozcan la importancia que tiene la prevención en una enfermedad como ésta.
El 85 por ciento de las pacientes afectadas por el cáncer de mama consiguen superarlo y continuar su vida, algo que se ha conseguido porque estos tumores se descubren cada vez antes. Sin embargo, este descubrimiento viene precedido de un pequeño paso de una importancia vital: la realización de una mamografía.
Depende de la edad. El mayor porcentaje de pacientes afectadas por rango de edad se encuentra entre los 45 y los 65 años, por lo que en esta etapa de la vida es importante acudir al especialista una vez al año para descartar problemas. De hecho, actualmente se están llevando a cabo programas de sreening de cáncer de mama dirigidos a mujeres en este rango de edad, por lo que se les realizan mamografías cada uno o dos años.
Según la AECC (Asociación Española Contra el Cáncer), en mujeres entre los 40 y 45 años solamente puede ser aconsejable la mamografía si existen factores de riesgo elevado como el genético. Hay que tener en cuenta que la mamografía es menos sensible en mujeres con mamas densas como ocurre en el grupo de mujeres jóvenes. No obstante, si se detecta cualquier tipo de dolor en la palpación o pequeños nódulos es importante acudir al especialista para descartar cualquier tipod de enfermedad.
No existe ninguna bola de cristal que nos pueda decir si padeceremos esta enfermedad, pero sí podemos estar alerta, como hemos explicado, y conocer las herramientas adecuadas para detectarlo. No obstante, estudios recientes consultados por la AECC aseguran que determinados hábitos pueden reducir el riesgo de padecer cáncer mama: